
Louise Fleury
El tiempo… es una riqueza – Conclusión, artículo 1-2-3
Tener respeto por el tiempo no significa que debo tener actitudes de perfeccionista, de súper activo. Demasiada organización no es más provechosa que la falta de orden completa. Cada uno debe descubrir sus tendencias, saber que tiene en sí los recursos para enderezarlas.
El tiempo es un amigo que me ayuda en toda circunstancia, puedo utilizarlo a mi gusto. No acepta nunca excusas, está allí, está esperando.
Hay que hacer lo que yo puedo hacer, nada más.
El tiempo tiene la riqueza de nuestras prioridades. Acompaña las acciones más sencillas, se deja utilizar, por naturaleza, es dócil. Acostumbrarse a escoger, es adquirir la sabiduría. Cada uno tiene una multiplicidad de elecciones que hacer a diario. Tenemos el valor de nuestras elecciones, el tiempo depende de su calidad.
Se debe desarrollar una capacidad de concentración, a fin de reajustarse a medida que los días se suceden. Un día a la vez, no más, no menos. En una carrera, lo importante es tener el buen pie en el buen lugar.
Extracto de la Colección Voluntarios de Dios: El tiempo… es una riqueza/Padre Louis-Marie Parent, o.m.i.
Los Volontarios de Dios - Renovación de las promesas
El 12 de diciembre 2022, el grupo de Voluntarios de Dios de La Tuque se comprometía de nuevo a vivir las cinco actitudes para el próximo año. Éramos diez, de los cuales una futura voluntaria.
Hemos leído el párrafo siguiente del libro del Padre Louis-Marie Parent, o.m.i. “Sobre los pasos de Jesús”. Las Oblatas en los países donde trabajan han agrupado laicos de toda edad y han formado un grupo considerable de cristianos comprometidos. Estos numerosos laicos extendidos en muchos países hacen cada año la promesa de vivir conscientemente, libremente, voluntariamente las cinco actitudes para ser artesanos de paz, elementos armoniosos y pacíficos constructores de serenidad. Hemos tomado conciencia de la fuerza de la unión de los Voluntarios de Dios en todo el mundo.
En las cinco actitudes, habíamos escogido el ser de servicio. “Un ser de servicio es un viviente inteligente, que se pone libre y voluntariamente del lado de Dios y que quiere ser un instrumento dócil a todas sus voluntades, tan pronto que nos son conocidas”. Sacado del mismo libro: tenemos que vivir esta actitud con más intensidad en los encuentros de Navidad en solidaridad con los más pobres y nuestro deseo de servir a este niño Dios.
Hemos rendido homenaje a María Inmaculada y su esposo José con oraciones y cantos. Nuestro compartir tenía como tema la fiesta de Navidad ligada con la fe, la esperanza y la caridad.
Nicole Nault
Soy agradecida / Compromiso secular
Estoy agradecida por todo lo que recibí en el Instituto durante estos 65 años
entregada a Dios y al servicio de mis hermanos y hermanas.
La Virgen me acompañó y me precedió en todos los acontecimientos que tuve que vivir.
Ella me ayudó a ser dócil a las inspiraciones del Espíritu.
El Instituto es mi familia y mi identidad.
Doy gracias al Señor.
Louiselle Beaupré
Foto: Rudy and Peter Skitterians de Pixabay
El acto de bendecir trae la paz
Mientras que nos encontramos al umbral de un año nuevo, constatamos que en nuestro mundo actual, hay una espantosa violencia que se amplifica. Frente a este aumento, estamos invitados a permanecer vigilantes en la oración y la caridad, caminando constantemente en presencia del Señor. Somos estimulados a vivir nuestras cinco actitudes de vida con más intensidad, más aún cuando ahora sabemos que constituyen el motor de nuestra misión.
Les presento esta pequeña sugerencia que nos ayuda a quedarnos en presencia del Señor y a guardar la paz ante todo lo que vemos y vivimos: la bendición. El acto de bendecir trae paz en nuestros corazones y alrededor de nosotros.
La bendición es una tradición espiritual tres veces milenaria. Remonta al tiempo de Moisés cuando el Señor le enseñaba una oración de bendición para los cohanim (los sacerdotes) a fin de que derramen esta bendición en el pueblo: “Yahvé te bendiga y te guarde; ilumine su rostro sobre ti y te sea propicio, Yahvé te muestre su rostro y te concede la paz”. (Nm 6,24-26)
Cuando estamos enfrentados a la violencia, recordemos de esta bendición y repitámosla a profusión, dirigiéndola hacia las personas que fomentan la violencia. Se puede limitar diciendo sencillamente: “Señor, bendiga a esta persona que está sufriendo”. Por nuestro bautismo, podemos, nosotros también, en el nombre de Jesús y en el Espíritu Santo, volvernos portadores de bendición de una luz que brota de las tinieblas.
También hay la bendición ofrecida como oración de acción de gracias al Señor por lo positivo que vivimos: “Bendito seas Tú, Dios del universo que nos das este pan, este trabajo, estos amigos y esta familia, etc…” Es la fórmula utilizada en la misa, por supuesto, pero que nos viene primero del mundo judío antes de ser utilizada en la liturgia.
Jesús en buen judío que era, hacía este tipo de bendición cada día, por la mañana al levantarse, antes de comer, de beber, acogiendo a los visitantes, etc. La espiritualidad hebraica brota del fondo mismo de la acción de gracias y de la bendición. Tenemos solamente que leer de nuevo los salmos para impregnarnos de ellos.
El Señor concede insospechadas gracias por nuestra voluntad en el acto de bendecir, de desear el bien a las personas. Se trata de creerlo.
Que seamos todos bendecidos/bendecidas al principio de este nuevo año, en Cristo Jesús, nuestra luz y fuerza.
Violaine Couture
Photos de Pixabay
Bautismo : Анатолий Стафичук
Vitral : yann-1
Bendición en cadena : timokefoto
El tiempo… es una riqueza (3)
Muchas personas solicitan tener tiempo.
No estamos solos en la vida. Hay que tener en cuenta a los demás. Tenemos derechos, pero también deberes. Los seres humanos son tan diferentes unos de otros que están forzados a veces a recurrir a otros o a socorrerlos.
Todos los días tenemos necesidad de los otros, como los otros nos necesitan a nosotros. Necesito alimentos, jabón, muebles, al final de cada necesidad mía, hay mucha gente que trabajan para obtenerme lo que reclamo.
Los días de huelga general, me siento desprovisto y me doy cuenta de que si estuviera solo, regresaría a la edad de piedra y estaría en una miseria insoportable.
Vivimos en un mundo interdependiente, es decir que debemos tener tiempo para compartir, intercambiar. Alguien a mi alrededor necesita atención, una vez es un enfermo, otra vez es alguien que me pide un favor.
Muchos solicitan nuestra escucha, siempre hay uno que siente la necesidad de hablar. Al mismo tiempo, puede pasar que lo que exijo para mí, otro lo necesita también.
Los demás no tienen que preocuparse por nosotros, no tienen que dominarnos, manipularnos para cambiarnos a su estilo. Lo más que se le permite, es hacer sugerencias, dar su opinión sin imponerla. Somos siempre libres de aceptar o rechazar una recomendación.
Cuidándonos, también protegemos el tiempo, esta riqueza que no puedo separar de mí.
Extracto de la Colección Voluntarios de Dios: El tiempo… es una riqueza/Padre Louis-Marie Parent, o.m.i.
El tiempo… es una riqueza (1)
El tiempo… es una riqueza (2)
Reloj de imagen: Gerd Altmann de Pixabay
Reflexión del burro del pesebre escrita por una oblata
Hace unas semanas, José recibió una noticia inquietante: tenía que ir a Belén a hacerse censar con su familia puesto que su descendencia es de esta región. Aun cuando su esposa está a punto de dar a luz, debe salir. Es una orden del Emperador Agusto.
Como hombre obediente, me ensilló con una bolsa de guano trenzado de cada lado de mi lomo. Después puso algunas provisiones, agua, 2-3 frazadas para el viaje. Además yo llevaba un poco de heno para los lugares desérticos. Y así partimos a duras penas, para hacer aproximadamente 160 km de camino entre valles y montañas. María embarazada, cabalga sentada en mi lomo. A pesar del peso de mi carga, trato de no precipitar mis movimientos ya que no era fácil para ella hacer todo este camino.
Muchos días agotadores nos llevaron finalmente a Belén. Ouff, ya era hora. María estaba a punto de dar a luz PY como los rechazaron al hotel, “una mujer que da a luz en medio de tanta gente, no puede ser, caramba”. Entonces, alguien nos mostró un establo con un poco de paja, donde ya se encontraba un buey. Por lo menos con nuestro aliento, tendrán calor.
Pero a lo largo del camino, a pesar del cansancio, la sed, a veces el hambre, yo era feliz porque yo, un burro, el animal de los pobres, ...llevaba al Salvador del mundo.
Querido burro: Estoy maravillada con tu perseverancia a lo largo del camino, de tu delicadeza para proteger María de las sacudidas del camino y del fiel servicio hasta el final: incluso en el establo.
Me haces reflexionar: nada de queja, nada de rebuznos, nada de crítica al duro camino y al peso en tu lomo. Ayudando a María haciendo lo mejor que puedes “estás presente” a tu manera en la venida de ese Dios que viene entre nosotros. Encuentro en ti, nuestras 5 actitudes de vida.
Jesús, aquí estoy cerca de Ti, me lleno de tu presencia, quiero desarrollar la perseverancia en mis acciones y la dulzura hacia los que me pondrán nervioso o me acapararán demasiado a veces.
Con mi actitud benevolente puedo acoger a los otros estando a su servicio según mis capacidades y, artesano de paz. Gracias señor burro por tu ejemplo. Gracias Jesús por tu ayuda en mi vida diaria.
Marie-Thérèse Gagné
Diciembre 2022, Trois-Rivières.
Congreso internacional (4) - En el corazón del mundo
En el Congreso Internacional de los Voluntarios de Dios, desarrollado el 16 y 17 de julio del 2022, contamos en el segundo día con la participación de los Voluntarios de Dios, quienes nos hablaron desde diferentes y más distantes partes del mundo, cómo viven la espiritualidad de las actitudes de vida.
La presentación fue iniciada por France Robitaille, ex coordinadora del Equipo Central de los Voluntarios de Dios por 20 años, quien reflexionó sobre el potencial de nuestra espiritualidad, nos invitó a adoptar actitudes cristianas que toquen los corazones de otros. Asimismo, pidió a todos los Voluntarios de Dios mostrar a través de nuestras actitudes, la fuerza y el coraje para dar a conocer a Dios, siendo testigos del evangelio; llevando esperanza e intensificando nuestra mirada de bondad, compasión y disponibilidad sobre todo para aquellos que más nos necesitan.
Posteriormente, los Voluntarios de Dios de diversas partes del mundo, compartieron con nosotros cómo viven nuestra espiritualidad a diario. De esta manera, Voluntarios de la India, Tailandia y Vietnam, compartieron cómo ellos ponen la presencia de Dios en primer plano, sin criticar, sin quejarse, apoyándose como grupo de Voluntarios de manera constante. Un gesto hermoso del Congreso, fue la entonación del himno de los Voluntarios de Dios de la India haciendo uso de sus vestidos tradicionales.
Algunos Voluntarios de Dios del Canadá francoparlante, compartieron con nosotros cómo la pandemia hizo reconstruir su forma de vivir la espiritualidad, usando los medios tecnológicos para acercarse unos a otros, continuando ser la semilla de Dios en el corazón del mundo. Igualmente, Voluntarios de Cornwall, Ottawa y Gatineau, compartieron con nosotros su convicción de que el Evangelio y las 5 actitudes de vida son la receta perfecta para ser felices y vivir en paz.
Los Voluntarios de Dios de Ecuador nos contaron cómo su experiencia de las actitudes de vida ha contribuido a construir su vida personal y familiar, día tras día, poniéndose al servicio de los grupos de Voluntarios.
Una pareja de Voluntarios de Dios del Canadá angloparlante, nos presentó sus experiencias de las cinco actitudes de vida con su vida matrimonial; esta espiritualidad les ha permitido crecer como pareja desarrollando actitudes positivas que se repercuten también en su intimidad con Cristo y su relación con los demás.
De la parte de los países hispanoparlantes, incluyendo a los americanos de habla española, los Voluntarios testimoniaron cómo su vida personal y de equipo fueron transformadas, a través de las dificultades, gracias a las actitudes de vida. Los Voluntarios de Cuba mencionaron cómo la espiritualidad los ha ayudado a ponerse a la escucha de unos y otros. Y en España, experimentaron también cómo las cinco actitudes de vida asociadas al Evangelio los ayudaron mucho para pasar a través de la pandemia.
Del Caribe, los Voluntarios haitianos compartieron con nosotros cómo reflexionan juntos sobre las acciones pasadas para analizar los errores y enfrentarlos sin temor, invitándonos así a permanecer abiertos al Espíritu a fin de continuar promoviendo la fraternidad y la solidaridad entre nosotros.
Y termino simplemente agradeciendo a Dios por tan maravillosa obra que se expresa en la diversidad de los Voluntarios de Dios, quienes, día tras día, se esfuerzan por seguir viviendo la espiritualidad Oblata centrada en la caridad de Cristo.
Esther Acuña Ríos
Responsable de los Voluntarios de Dios
Una maravillosa Navidad
Hola, soy Pax,
fui creada para hablar de spiritualidad.
También tengo una amiga Mia que te presentaré.
Deseo que seas portador y portadora de esperanza en el corazón del mundo.
Que tengas una maravillosa Navidad y un año lleno de alegría y Paz.
Hasta la próxima.
Los Institutos seculares, dinamismo para mañana
Después de nuestra A.G., de la Conferencia Belga de los Institutos seculares y después de haber participado en el proceso de sinodalidad en la Iglesia de Bélgica, profundizamos y progresamos sobre la cuestión de nuestro lugar en la Iglesia de mañana como secular consagrada.
Desde algunos años nuestras sociedades conocen ya una crisis: hay una ruptura entre la civilización de ayer y la que surge tan mal que bien hoy. Estamos convencidas de que esta crisis llama a nuevas respuestas y efectúa replanteamientos radicales.
Hay que buscar salidas, claves para desembocar en otra cosa. La cuestión no está más de ser optimista o pesimista, sino saber cómo vivir los cambios encontrando en ellos un sentido, para nosotros personalmente pero también para la humanidad.
¿Qué mirada debemos poner hoy sobre un mundo inseguro, en cambio y sobre nuestros contemporáneos? ¿Es una mirada que ve solamente los obstáculos y las dificultades que vivir? ¿Una mirada sobre lo que se derrumba en nuestras sociedades? ¿O más bien una mirada que se apega a situaciones, acontecimientos, una mirada que abre un futuro a la humanidad?
Hoy día, esperar no va de por sí ya que esto altera no solamente nuestra esperanza humana sino también nuestra esperanza cristiana. Ahora bien, la esperanza forma parte de la condición humana: no se puede vivir sin esperar porque nuestra existencia se escalona entre un pasado, un presente y un futuro. Sobre el pasado, ya no podemos intervenir; en cuanto al presente, este pasa rápidamente y nos frustra porque se nos escapa. Sin embargo, sobre el futuro podemos tratar de intervenir.
La crisis no es solamente económica o cultural, es más bien una crisis del sistema de explicación del mundo. Esperar es apostar sobre el futuro, es considerar que un futuro es posible para una persona, una sociedad. Pero si la esperanza por hoy no está bien, tal vez esto quiere decir que sirva para una elección, una decisión personal, un acto de voluntad.
Nuestra fe cristiana no nos arranca de nuestra condición humana, se inscribe en nuestras actitudes fundamentales de consagradas. Todavía más, la esperanza cristiana exige de nosotros, miembro de un instituto secular, vivir en el corazón del mundo la lucha de la caridad y de la justicia. La esperanza no es desmovilizadora, pero se vuelve un estimulante para actuar. (AG de la CNBIS, octubre 2022)
Para nosotras, Oblatas Misioneras de María Inmaculada, debemos ser sembradoras de la caridad de Cristo, ser otro Cristo, nos dice el Padre Parent, o.m.i. Nuestra espiritualidad debe movilizar todas nuestras células, las cinco actitudes evangélicas deben volverse normas integradas en progreso para, como los discípulos de Emaús, llegar a ser peregrinos.
Estamos sumergidas en el mundo donde debemos dejarnos alcanzar por lo desconocido, por Cristo. Hay que recorrer todas las etapas, sin pararnos en el camino, o dar media vuelta. Debemos parar en el “albergue” para compartir nuestras experiencias, escucharnos y mirar nuestras miserias, nuestros éxitos para que nuestro ser se vuelva testigo de Cristo.
Françoise Lequarré, Bélgica- Europa
Fotos:
Mundo: Gerd Altmann de Pixabay
Paloma: Ian Henderson de Pixabay
Navidad bajo la mirada de la espiritualidad
Una presencia ante Dios y el mundo, es lo que me motiva cada día para ayudar a mis vecinos y más todavía en el tiempo de Navidad. Mi vida de intimidad con Cristo me despierta a las necesidades de mi medio.
Vivo rodeada de cinco familias de Siria, una de Madagascar y dos autóctonas. En Navidad, decoro el interior y exterior de mi departamento con escenas religiosas. Es una ocasión de explicar el sentido de mi religión a los que me hacen preguntas.
En la revista de Notre-Dame-du-Cap, de septiembre 2022, con la ayuda de la inteligencia artificial, se presentó un retrato muy realista de Jesús. Noto que este Jesús de la revista tiene muchos rasgos parecidos con mis vecinos de Siria. Para continuar la comparación, yo la veo también en la decena de niños que juegan en el patio, un pequeño Jesús muy amable.
Todas estas coincidencias estimulan mis acciones y me invitan a buscar la voluntad de Dios en el corazón del mundo. Tal como en Halloween, tendré una pequeña sorpresa en Navidad para mis jóvenes amigos.
¿Navidad, no es tiempo para compartir con las personas que todavía no están adaptadas a nuestro país?
Para mí, vivir Navidad es testimoniar la caridad en todas las ocasiones que se presentan.
Lise Jacques
Trois-Rivières, diciembre 2022
Fotos:
niño: Pexels de Pixabay
Jesús: ʌʅєҳʌɲɗɾʌ ɱontanaro de Pixabay