Viernes, 28 Noviembre 2025 22:12

Peregrinas de esperanza

peregrinoDentro de dos meses, llegará a su fin el Año Jubilar 2025, proclamado por el Papa Francisco, bajo el lema: "Peregrinos de esperanza". Comparto con ustedes cómo se concretizó esta peregrinación para mí. Una experiencia de comunión, vivida con la Iglesia universal, como Oblata en mi región, al servicio del Instituto. El llamamiento vino del consejo regional para apoyarlas en la preparación de la Asamblea Regional de octubre de 2025. Confiada y segura de que esto formaba parte de mi proyecto apostólico, ¡acepté este reto!

Habitada por el movimiento y el tema de este año jubilar, "Peregrinos de Esperanza", me pareció profético que también pudiéramos colocarnos en este espíritu, en este aliento de vida para preparar esta asamblea. Sí, todas peregrinas de esperanza, teníamos que tomar conciencia de nuestra realidad regional. Disminución rápida en el número de oblatas capaces de asumir responsabilidades en el futuro inmediato, dificultad para imaginar un funcionamiento más flexible, etc. Por lo tanto, necesidad de esperanza y de confianza para ser capaces de privilegiar la audacia de una mirada nueva y de la marcha en nuevos senderos.

Para la peregrina de esperanza que quería ser, había cierto pasaje de riesgos, a veces de sufrimiento, oscuridad y muerte, pero con la certeza de que ese pasaje conduciría a la resurrección. ¡Y, es juntas que debíamos vivirlo!

A lo largo de la preparación de la peregrinación regional, con todas las compañeras, hemos caminado, en primer lugar, situándonos como peregrinas oblatas en el corazón del mundo, teniendo que asumir nuestras debilidades, nuestras pérdidas de capacidades, nuestros duelos... Así que nos aferramos a nuestro bastón de peregrinas que nos identifica: personas consagradas en el corazón del mundo para testimoniarel amor incondicional del Padre a través de nuestras actitudes apostólicas. Nuestros 5 puntos nos ayudaron a explorar nuevas vías para vivir un funcionamiento más sencillo.

Qué hermoso procedimiento vivido en 12 encuentros-salón. 55 compañeras participaron con todo su corazón, su amor por el instituto y la preocupación por cada una.Avanzando en edad, pero muy vivas, con los tres miembros del Consejo, 24 oblatas dijeron Presentes como participantes en nuestra cuarta asamblea regional.

En preparación para las elecciones, la peregrinación concluyó dentro de un marco de discernimiento donde el compartir fue de una riqueza inconmensurable.La ofrenda de cada una expresando sus riquezas de ser y también sus límites para aportar lo que pudiera a la región. Viví allí, el final de la peregrinación de la asamblea, colmada de tantas gracias emanando de la riqueza de mis compañeras.

¡Magnificat por todo Señor!

Céline Girard, Región América del Norte Este, 15 de noviembre de 2025